lunes, 22 de octubre de 2007

La pasión estrafalaria

LA PASIÓN ESTRAFALARIA.

Este es el último poema del libro.
Recordamos, una vez más, que el acceso está restringido a los menores de 21 años.
La responsabilidad está delegada y queda exclusivamente, en manos de padres, tutores o personas a cargo de los menores que entren al sitio.






UNA PASIÓN ESTRAFALARIA.


A Charles Bukowski y sus fans.



El diario lo decía, con todas las letras:
La persona que lee entre uno
y nueve libros al año
se considera “poco lectora.”


Quería ser escritora,
mejor aún, poeta,
así que leía todo lo que podía,
en los intervalos, en el subte,
por la noche,
en Sarandí, en Paris,
las nuevas generaciones,
los clásicos,
el horóscopo del Bazooka.


Pero, ni haciendo el mayor esfuerzo
podía recordar cuarenta libros
(uno por año, suponiendo
que hubiera empezado a los ocho)


Sorprendente.
Era una “poco lectora”.
Por mi cabeza rondaban
tres o cuatro títulos,
(con un esfuerzo genuino
llegaba a seis).


El resto lo había olvidado
en una derogación voluntaria.


Hay gente, que suele adornar
sus presentaciones públicas y
entrevistas,
con ilustres apellidos,
floridos y originales como
alguaciles de verano.


Yo no podía recordar
una sola cita literaria
que valiera la pena.


Hasta que una noche
me crucé con el poema de Bukowski:
“La palabra”


Vaya broma.
El tipo reconocía que era el segundo.
Un tal Céline, autor de El viaje
le había arruinado el primer
puesto de genio.


El caso era que
yo no había leído a Céline
en absoluto,
y de Hank
apenas conocía poemas sueltos:
La máquina de follar,
casa de empeño
y el cívico relato del cordón desatado.


Así que me sentí ridícula
y pequeña.
Pasaba a ser la tercera.
La segunda, bueno,
es como la Pepsi,
bastante tolerable
pero, no me podía resignar
a ser la Fanta
o una de esas gaseosas de supermercado chino.


Entonces,
se me ocurrió una idea
(nada genial, ni siquiera original).
Solo una idea.


Fui al baño a masturbarme
en el bidet,
pensando en Buk.
Verrugoso, deforme,
escasamente sensual y gris,
pero segundo al fin y al cabo.


Fue una de las mejores pajas
de la historia.
Mientras gozaba
el roce del agua tibia
sobre la piel
me acordaba del pobre Chinaski
y su íntima sumisión masculina
a mí lúdico sexo.
El hombre suplicante
buscando libar los pezones duros
y los pechos todavía firmes
con ansiedad de borracho consuetudinario.


Rogante, calvo,
entregado a
mis metafóricos abrazos
como una madre superiora,
como la magnífica puta de sus poemas
mientras me fifaba al viejo
con toda la lujuria de
sus versos
conmovedoramente rancios.


Cuando llegué al éxtasis,
los ojos mojados, la lengua seca,
jadeante entre espasmos,
supe que estaba preparada
para ir por Céline
y ponerlo debajo de mi falda.


Las mujeres somos así
y hacemos cosas como esas
para desesperación de los números uno
y dos y ochocientos cuarenta y nueve
y último de la fila.


No se rasque, caballero.


En definitiva:
soy una malísima lectora
de relatos
con crímenes perfectos,
cacerías humanas
o espionajes masónicos,
aunque como
la Chapmanita* tiene conciencia de la Mesa,
y soy creyente,
aprendí a vengarme de sucios escritores
del carajo
cargándolos con arte,
subida al palo mayor
de sus naves de los locos.










de Chapman (el loco que mató a Lennon).

---

sábado, 20 de octubre de 2007

20. Seis minutos

20.-

SEIS MINUTOS.


Después de seis minutos de chupada
como si el tiempo fuese lo de menos,
el pene erecto perforó en los senos,
el lánguido placer de su morada.


La espada puntiaguda y arrobada
buscaba en otro cielo los ajenos
sudores, y los gritos más obscenos
gimieron ante el arma descargada.


Y a poco de volver a dar un sorbo
de la bota de vinos y salivas
se abrió como amapola la vagina

y atracó su ninfómana rutina
acogiendo en furor las siempre vivas
esencias del avaricioso morbo.

19. Desnudeces

19.-

DESNUDECES.



Desnuda y entregada a tu cintura,
perdida entre las cortes de los jueces,
mancillada una vez y tantas veces,
jurando que me excita una locura.


Partida de ajedrez en la basura
donde pastan los cerdos en las heces,
me tiraste en la fosa que con creces
dotaste en el figón de la espesura.


Hoy me alberga un impacto taciturno
de conseguir garitas de tiovivo.
Admito que desprecio cada turno

porque sé que este alambre en el que vivo
va dejando tirado en el coturno
del sado-desamor otro recibo.

18.- Sexo Telefónico

18.-


SEXO TELEFÓNICO.


La voz en el teléfono acribilla
"quiero coger, ahora, ave morena"
reta el hombre secuaz a la chiquilla,
excitada María Magdalena.

A solas en su cuarto se acuclilla,
el goce del gemido la condena,
entregada va al mulo y a hurtadillas,
él embiste la hiel de su colmena.

Reina impúber, “te sobo y te la meto”,
(yo exalto los delitos que cometo).
"Lujuria del relámpago a porfía

te preño con sabor de porquería ,
enfermo tu pudor con mi deseo,
ardiendo y devorándonos, te creo".

17.- Prostitutas

17.-

PROSTITUTAS.


Ardiente por aforo, chupapijas.
El semen de la boca a la garganta
como un veneno sórdido atraganta
el rayo de libido de las hijas

de Eros. Y la noche en las rendijas
que amanece lamiéndole la santa
cabaña, inquisición, que no se espanta
ni lleva comezón en las sortijas.

Otra mueca de excesos y pecados;
otro albur con estupros avarientos,
otra zona de tedios incubados

por hombres que les pegan unos cientos
de ladillas y virus infectados
y el deseo jamás bebe los vientos.

16 Laberintos

16.-

LABERINTOS.


Navegante de Ariadna y de Quevedo,
castrada por el guante indivisible,
vas lamiendo la estela inmarcesible
del registro de un toro por el ruedo.

En cierta forma de mamario puedo
solventar la extrañeza inaccesible.
Es tiempo de manar un imposible
en ventanas sin luz, quemar el miedo.


No hay fuego suficiente para asarlo
sin la pira caliente de la dama,
en la cama somier donde hay que atarlo.


Del negro continente, sombra en drama,
el clítoris dispuesto a no evitarlo.
Hijos del siglo XX, Cuor en llama.

viernes, 19 de octubre de 2007

15 La verga

15

LA VERGA.


Cuando acampas tu verga ante mi boca
y sacias entre labios naturales
el hambre de tu ardor que me provoca
al canto de tus nalgas señoriales.

Cuando adentras despacio en mis axilas
y en mi vientre, y te fundes por descuido
en el duro bastión donde las filas
rompieron sin hacer el menor ruido.

Cuando tocan tus dedos a mi ombligo
y te miento con ávido reparo.
Cuando cuelgo en el freezer lo que digo

para evitar morir con tu disparo.
Cuando celo tu nuca y te castigo
y cobro algo que es gratis, con descaro. 

14.- Falo

14.-


FALO


Amando por amar, aman su falo.
Se revuelcan en furias bautismales;
son el goce y la sed en fantasmales
escenas de lujuria y vino malo.

Se internan en las grutas con un palo
duro y huyen murciélagos feudales,
sus lascivas bocas elementales
salivan las cavernas de regalo.

Hombre y mujer, dos mágicos narcisos,
perpetuos en su lucha, maniqueos,
fetiches con alforjas en sus vuelos,

chupan, arden, se trenzan en los pisos,
aire y tierra se acoplan en deseos
y estalla la pasión entre dos velos.

13.- Alumna

13.-


ALUMNA-


Espía por detrás de una columna,
la sierpe en la bragueta ya escondida,
el maestro de la noche perdida
ve los besos de araña de su alumna.

Vaginal se le mete en la garganta,
señorita del cuadro de Avignon
que se toca alterada de pasión...
¡qué infiel es la belleza a quien la canta!


Las babas del azogue que lo endiosa
como núcleo del circo cortesano
son de semen infértil y en la mano


el pájaro se vuelve mariposa.
Los ayes de placer de una mocosa
lo incitan a un orgasmo por el ano.

12.- Surrealismo

12.-

SURREALISMO.

A Andre Breton.

¡Qué tarde recordó el mundo nacer
en mi cama! Los ecos virulentos
de tus famosas ganas de perder
me enlazan al barral de los lamentos.

Y, sin embargo, "una mujer con talle
de nutria", escarapela sevillana,
te tienta con arándanos del valle,
"lengua de ámbar", y manos de sultana.

Hay hombres (no “con hombros”) de champaña,
que descorchan las rubias calaveras
que mienten cuando inventan que te aman,


reclutan surrealismos de alimaña,
que insultan a la noche entre cegueras
y cuando se les cae la rosa braman.

jueves, 18 de octubre de 2007

11. Dos hombres

11.-


DOS HOMBRES


Dos hombres en la noche que se enferma,
incendiando su sexo desalmado,
entreabiertas las piernas de costado.
Del rubio perfumero fluye esperma.


Un ciego taladrar en desafueros
con hálito carnal goza el impacto
y lo devora el otro con su tacto,
libando los pezones como cueros.


Una humedad que sube le desborda
las nalgas de una santa mujer gorda,
al tipo que está al lado del espejo.


Señora del placer, la sodomía
gran teta intelectual de la armonía
desvío de Platón del mundo añejo.

10. Manchas

10.-


MANCHAS.

En el tálamo han quedado las manchas
del vacío de tu ombligo y mis prendas;
en cuartos oscuros perdí las sendas
de labios naif con caderas anchas.


En mediomundo sabes que me enganchas,
pavo real que tuerce componendas,
no alcanzan tus alcoholes ni las vendas,
para aliviar heridas y avalanchas.


Inca de mi vida, en Picha Macha
te bordé las alas con los destellos
de nubes, mañanitas y oropeles.


En leyendas de Túpac sin bombacha
destripo llagas, sangren por los cuellos,
resuellos de trompeta y escabeles.

9.- El huracán de los pederastas

9.-

EL HURACÁN DE LOS PEDERASTAS.


Explícito y vulgar. Acogollando
los cuerpos de las niñas del Katrina
se anotan pederastas en el bando
de los viejos que corren la cortina.


Penetran en los claustros reculando
apetitos con ávida sordina,
y mientras se la rascan eructando,
desvirgan a un infante en la cocina.


Les pagan las mamadas una pasta,
-virginal oro en manos delictuosas-.
Las babas de los hombres quiebran sueños


de pequeños que nunca dirán basta,
porque cotizan sus vidas luctuosas
descarnándose el culo ante sus dueños.

8.- Sin condón


8.-

SIN CONDÓN.


Amarte sin condón. Ese es mi estilo
soy una bestia cuando me defiendo;
hay formas, ¿qué te digo? que no entiendo,
me acusan de lo mismo que ventilo.


¿Acaso el sin sentido tiene en vilo
al sexo, la lujuria sin remiendo,
lo sublime de un acto profiriendo,
cuchillas vaginales con su filo?


El riesgo de tu órdago en mi cueva
es el pan que alimenta a quien no odia
los goces de una sabia esencia nueva

si nace con el miedo entre las cejas.
que confunden gramática y prosodia
de las putas más putas por ser viejas.





7.- Una y otro

7.-


UNA Y OTRO.

Quisiera ser el vaso que te bebe
las ebrias liquideces infinitas,
dolerte y en tu boca ser tiritas
del injusto bizarro que nos mueve.

Quisiera prodigarme con acierto,
quitarte del hocico tantas culpas,
ser la luz navegante hacia tu puerto,
encender tus desmanes sin disculpas.


Y hartarme de tus viajes ambulantes,
resignar la avidez de poseerte,
derribar tu portal, hasta quererte


lastimando el dolor que aró mi suerte
si exigieras administrar mi muerte,
penando en aquelarres asfixiantes.

miércoles, 17 de octubre de 2007

6.- Orgía

6.-


ORGIA.



Que te puedo decir que sea más sucio,
que arañe con mi sexo tu cintura;
trincar tus agujeros con locura,
penetrante nirvana en el prepucio.

Con sabias libaciones de Confucio,
Kamasutras en celdas de tortura,
ponértela, patrón, mucho más dura...
¿Qué te puedo pedir que sea más sucio?

Todos son bienvenidos a la orgía
de miembros de la noche en compañía
de efebos y modelos orientales,

negros con senos, guau, descomunales
y vírgenes cerditas o madamas.
¿A quién has de invitar a nuestra cama?

5 El deseo demorado

5.-

EL DESEO DEMORADO.


El deseo se agita en un sureño,
fluyente mar de esclusas y camina
seguro el paso, antecesor del dueño,
al altar de una piel. Gloria divina.

El pecho se retuerce con empeño
ante el bulto del tigre que se empina;
la boca soba y lame como un sueño
y bebe el licor acre de la espina.


¿Qué puede superar el erotismo
de dos lenguas ardientes enlazadas?
Allí te encontraré, que no es lo mismo


amarse en la ilusión de las almohadas,
que enseñan el brillante catecismo
del desnudo de noches demoradas.

4.- Náufrago de una isla capicúa

4.- 

Náufrago



Náufrago de una isla capicúa,
agua fuego, candil en la penumbra,
zarpazo de horizonte que me alumbra
con canciones de Sabi y Gargantúa.


Acaso se le pierde alguna púa
si sacude en la cresta que lo encumbra
de la mano de un godo que vislumbra
un destino que el tiempo perpetúa.



Frontera trágica, espiral de espuma,
la mente va embotada en monasterios
de padres y hermanitas del Misterio


que bordan las banderas de Ayohuma
y la mediocridad deja al imperio
descubierto ante el precio de la suma.




3.- Masoquismo

3.-

MASOQUISMO.


Pornoautor masoquista dromedario,
desquiciado, rumiante su capote
¡Las veces que ha gozado este tipote
las manitas del macho proletario!


Aquí no hay que pagar precio usurario
que todo es tan venial y hasta simplote
la musa lo provoca con su escote
y él saca a relucir su abecedario.


Amante de mulatas argentinas
con pubis inquietante y vespertinas,
fogatas, siete vidas de avatares.


De rodillas se bebe los manglares
inclinando sus petos y espaldares
en aguas siempre turbias y anodinas.

2.- Chancro

2.-

CHANCRO.

Sentada ante el umbral de sed naranja,
vencida por un rey pagano y mítico,
desplumo cada pollo de tu granja
lamiendo de tu chancro sifilítico


las gotas de lo enfermo y los perversos
desmanes del furor llenos de magia.
Los golpes de garrote y sus reversos
decoran la ilusión de antropofagia.


Que si sangra la carne de los labios
y quedan diez cabellos en las manos
arrancados con negros besos sabios

del clérigo ataúd de los marranos
nacerá el hijo audaz de los agravios
de este sexo entre laicos y profanos.

1.- Sexo y poder

1.-

SEXO Y PODER.

Un sinfín de esmeraldas delirantes,
un barco, una avioneta, cien hectáreas,
imágenes cambiadas por brillantes.
Mejor que cien hectáreas mil hectáreas.

Dinero en abundancia. Caja Fuerte,
sudores a mis pies de porcelana.
Bendito culo que me dio esta suerte
de trocar abalorios de gitana.


¿Qué habrá que hacer? ¿A qué hora nigromante
ser hembra, mariquita, falso amante,
mujerzuela de Sade o prostituta?


La ambición pornográfica es mi ruta
del placer al poder escalofriante,
que tarifo con versos de permuta.

CARTA DE PRESENTACIÓN - PRÓLOGO ADVERTENCIA

Este es el prólogo del libro inédito:

20 sonetos pornográficos y una pasión estrafalaria.

Con algunas correcciones epocales se sirve tal como circuló en las redes por suscripción privada.

"Una poeta amiga dijo que mis sonetos son porno-erótico-sociales y me hizo reír con su ocurrencia porque yo agregaría humildemene: porno-erótico-místico-sociales-filosófico-irónico-ambientales-lúdico-trágico- temperamentales y hasta, de vez en cuando, poéticos, si se me permite la indiscreción.

Estoy intentando describir el sexo pornográficamente a través de la palabra lírica, usando distintos estilos e imágenes.

No todas las películas porno son iguales.Y si tuviera que limitarme a las que más público tienen y continúan en cartelera o en pantallas del televisor, el asunto sería mortalmente aburrido, porque como he dicho muchas veces me da grima esa gente de plástico con enormes penes y tetas que hace piruetas casi acrobáticas para llegar al orgasmo, cuando no otras que me deprime la mirada unidimensional del problema erótico con la construcción que de él han instalado Nueva York y California.

Vamos a instalar algo superador.  Pido disculpas, de antemano, por el atrevimiento.

Aunque las divas ganen muchísimo dinero y puedan hasta comprar sueños que nos están vedados, con su trabajo antiestético y poco estimulante a los sentidos, seguiré en este caminito.

Gran cantidad de gente se ha vuelto torpe e impotente de tanto mirar esos cachivaches en cintas de video o pantallas del ordenador, porque les alcanza con las imágenes de esas falsas sensaciones que crean una realidad virtual sospechosa y con ello satisfacen su pobre libido.

Históricamente, se ha asociado el placer masculino a la libido, la perversión, el goce, la actividad sexual y las obsesiones, y por otra parte, se ha admitido que el tipo femenino está relacionado con represión, neurosis, histeria y pasividad.

Estos órdenes se ven alterados en este poemario, desde el momento que provocan similar majestad entre hombres que hacen de las mujeres sus objetos de deseo u onanismo mujeres que utilizan el cuerpo equiparándolo a un producto de mercado.Trataremos de saltar los muros de la hipocresía mediático-burguesa.

El limite entre lo erótico y lo pornográfico lo dará la propia y compleja constitución interna de cada lector.

Podremos decir, por fin, que igualdad de los sexos no significa identidad de los sexos, y que la noción de bisexualidad, dada como doble goce psicológico, es un arcaico concepto creado por una sociedad machista heredera de la filosofía platónica o cuasi platónica, que no reconoce los méritos intelectuales del sexo femenino que no convengan a sus espurios intereses egocéntricos de dominación colonial y esclavista.

Si los textos son prohibidos para menores la responsabilidad por la entrada a ellos será exclusivamente de los padres ausentes.

Los menores son incapaces de derecho y tienen un consentimiento viciado a la hora de contratar.

No obstante por las redes se facilita el acceso a páginas porno explícitas, con imágenes chocantes que les pudrirán el cerebro sin derecho a réplica ni pataleo, al pequeño que acceda a ellas.

Estos sonetos tan crudos y soeces en algunos aspectos, instigan a adoptar teorías y posturas ante el hecho clandestino de la pornografía, la pedofilia, las perversiones más o menos aceptables y la posibilidad de encontrar una imagen provocadora por medio de la palabra (lo que implica un desafío tantísimo mayor)

Advierto no entrar a leerlos por puro morbo.
Ni modo.

Para conmover con ese tipo de literatura hay que excitar a toda la humanidad no solo a una sola persona: el lector interviniente, que no es mero espectador crítico sino que participa de la actividad sexualmente engañosa del escritor.

Amar es siempre una amenaza.
El que lo logra hizo bien su trabajo.

Yo misma."

Lu